miércoles, 21 de abril de 2010

Depresión posthuelga


Cojo el asunto fuera de contexto y acepto a beneficio de inventario que esta aclaración sea necesaria. Aunque rebuscando en la propia experiencia, cuando nosotros salimos (hace tiempo) a la calle reclamando unas perrillas más (un salario justo), primero estábamos de huelga y después deprimidos porque el coste del ejercicio del derecho al pataleo (descontado en la siguiente nómina) más el de las cañas y tapas (que consumimos muy agusto) fue el balance final de la aventura en €urazos a pagar.

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