Los Dalton van a Jamaica

Bajando mismamente por la calle Preciados me encontré a un febril dicípulo de Bob Marley que por el movimiento que llevaba (a pesar del público difícil que transitábamos) me apeteció hacerle diana de mi función de ráfaga. Lo Poltergeisteresco del asunto es que al clonar y juntar todas las posiciones en la perspectiva de la línea de la acera, el personaje merma e incluso rejuvenece a ojos vista. Juro que las siluetas no están distorsionadas en tamaño; para demostralo aporto segunda foto sobre fondo blanco en que las siluetas están exactamente igual que en la pared de la Fnac sólo que con el pie derecho alineado en la horizontal roja.