martes, 3 de mayo de 2011

Nuevos tiempos, recursos de siempre

En el verano del 74 mi padre nos compró 8 sombreros rojos de vaquero a los 8 hermanos y nos metió en un coche rumbo a Cullera. Ahora pienso que la idea era localizarnos en la marabunta levantina de la época. Mi sombrero al final tuvo que ser azul porque de mi diámetro craneal no se hacían en tonos vivos. Ese año no me perdí, tampoco volvimos Nunca Máis.

5 comentarios:

  1. ¡ ESE CABALLO QUE VIENE DE BONAAANZAAAAA...!

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  2. No te preocupes Ricciardi, las zonas despobladas de tu "capita" hacen que parezca de un tamaño cuasi normal :)
    Y si te pones la camiseta blanca.... ufffffff...mmmmmmm....ohhhhhh... ya ni se te ve la perola ! jajaaja
    TranSocurrente

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  3. ¿Despobladas?, serán reflejos de luz, carezco de conciencia de calvedad.

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  4. Thuder, o te dio el sol más de la cuenta o el fandango viene a cuento de la entrada del caballo del sushi.

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  5. LO QUE LE OCURRE A RICARDO, JADEANTES SEGUIDORAS, ES QUE ESTÁ ASÍ PORQUE CRECE MÁS RÁPIDO QUE SU PELO.

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