lunes, 7 de marzo de 2011

El agradecimiento sin control está descontrolado

¡Oh!, ¡mil gracias!, siempre desee tener un buda de cristal de caramelo de 30 Kgrs. de peso, que departe animadamente recostado sobre el tigre supérstite de la pareja de hermanos siameses, cuyo desgraciado congénere se desayunó por la mañana el risueño y flacucho personaje. De ahí lo condescendiente que se muestra el fiero felino.

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