EL Callao ha sacado sendas pantallas a uno y otro lado de su famosa fachada cortada en chaflán. Me quedo embelesado con los ojillos de la Ginger Rogers más plena que me brinda unos Kindest Wishes que deben ser una edición limitada de los huevos de chocolate con sorpresa.
¡Por Dios y por la Virgen! ¡Menuda cursilada, tío! No me digas que te embelesa esta pedorra. Prefiero tu ramalazo callejero persiguiendo minifaldas a traición, la verdad.
ResponderEliminarLatixer que vino del frío del aire acondicionado. Echaba de menos algún hachazo tuyo aunque creo que si te pasas por allí y dedicas un minutillo al pase de mundo viejuno de la pantalla del Callao, también te prendarás.
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